Empecemos
por lo cercano ¿vale? Se trata de adquirir el compromiso de hacer que nuestro
entorno cercano, sea feliz. De ocuparnos
de ello con cariño, presencia, servicio, sonrisa, perseverancia, entusiasmo... con
alma.
Demos
un paso adelante y procuremos ser protagonistas
de nuestra vida y de nuestro entorno y no meros espectadores. Vamos a sacarnos
el carnet de conducir… nuestra vida y ayudar a la conducción de la gente que
viva a nuestro alrededor.
Y
cada vez que alguien nos dé las gracias por hacerles más felices, vamos a
sonreír de manera especial. Y pongamos una estrella en nuestra agenda, como los
peques
Tal
vez así y sólo así, las cosas empiecen a cambiar. De abajo arriba. Siendo
nosotros los actores del cambio. Y entonces, cuando nosotros sintamos que hemos
hecho nuestra parte del contrato, y sólo entonces, exijamos a los demás que
cumplan con la suya.
Esto
sí que está en nuestras manos y mantener esta actitud, nos acerque al espíritu
de la Navidad. La felicidad no la podemos comprar, ni nos la pueden vender, nos
la tendremos que buscar.
Venga, ¿lo intentamos?
Venga, ¿lo intentamos?
El claustro de profes os desea FELIZ 2019
